Las 9 preguntas más difíciles en una entrevista de trabajo

La entrevista de trabajo es un proceso de eliminación y como tal debemos entenderlo. Así que una vez que éste comienza, es importante que nunca bajes la guardia o descuides cualquier aspecto que pueda darle al entrevistador motivos suficientes para descartar tu perfil y sacarte de la competencia por el nuevo empleo.

Precisamente uno de los momentos cruciales de cualquier entrevista, es cuando el reclutador decide pasar a las preguntas decisivas o claves para definir quiénes seguirán adelante y quiénes se quedarán en el camino. Aunque quizás existen muchas más, en la lista que encontrarás a continuación te mencionamos las nueve más importantes que destacan la mayoría de los expertos en reclutamiento y selección de personal.

Como todo en la vida, debes entender que las mejores oportunidades se obtienen con mucho esfuerzo, así que para responder a estas preguntas será importante que estudies y te prepares muy bien para el momento. También es importante que ensayes tus respuestas, así estarás seguro de que no te tomarán por sorpresa. Con ese firme objetivo, aquí te dejamos las preguntas y las posibles respuestas que podrías dar para salir airoso y tener éxito:

1. “¿POR QUÉ DEBERÍA CONTRATARTE A TI?”:

Es una pregunta fija en cualquier entrevista de trabajo. La intención del entrevistador es saber cuál sería el valor que le añadirías a la empresa, no porque eres buena persona o cualquier otra cosa. En ese sentido, intenta responder ilustrando las razones que te hacen el candidato idóneo para el puesto. Una buena manera de hacerlo es repasando la descripción del puesto y mencionando las habilidades que piden allí. Luego, tienes que citar experiencias y conocimientos de tu carrera que estén asociados a esas habilidades.

2. “CUÉNTAME ACERCA DE TI MISMO”:

Otro planteamiento difícil, ya que inmediatamente piensas “¿qué cuento?”. Tienes tantas habilidades que no sabes por dónde empezar, te pones nervioso y puedes terminar balbuceando cualquier cosa. Esta pregunta se hace al principio de la entrevista generalmente. El entrevistador no quiere que repases tu currículum de cabo a rabo, pues ya lo tiene en la mano. La mejor manera de responder a esta pregunta es desarrollar estos cuatro temas: los primeros años de tu vida, tu educación, tus experiencias laborales y tus experiencias recientes en el campo laboral.

3. “¿QUÉ DIRÍA DE TI LA PERSONA A LA QUE MENOS LE AGRADAS EN EL MUNDO?”:

O, en su defecto, “¿qué debilidad consideras que posees?”. Es una pregunta fija en cualquier entrevista, ya que el entrevistador quiere saber los aspectos negativos de tu vida. La manera inteligente de responderla es nombrar una cualidad negativa tuya y transformarla en algo positivo para el trabajo; por ejemplo, decir que eres impaciente. Podría ser algo negativo en tus relaciones de trabajo; sin embargo, podrías enfocarlo como una cualidad positiva que te permite cumplir a tiempo las fechas de entrega y trabajar bajo presión.

4. “¿QUÉ SALARIO CREES QUE MERECES?”

Según el consejero de carrera, Dr. Thomas Denham, la persona que primero declara un salario es el perdedor. Eso quiere decir que si te aventuras primero a decir una cifra, nunca sabrás si el número es inferior a lo que el empleador estaba dispuesto a pagar. Aunque sientas tentación, lo recomendable es esperar a que el empleador o el reclutador te ofrezca un rango y, cuando te pida una cifra, ofrécele una que esté por encima de la media que te ofreció. Y recuerda, ¡nunca hables de salario en la primera entrevista!

5. “¿QUÉ NO TE GUSTÓ DE TU ÚLTIMO TRABAJO?”

Con este tipo de preguntas el empleador puede estar buscando tu punto débil o tu talón de Aquiles para sacarte rápidamente del proceso de selección. Así que no te sientas tentado a responder con el corazón, es importante que ante este tipo de preguntas te mantengas centrado y enfocado en tu objetivo. En vez de quejarte del maltrato de tu jefe anterior o de las excesivas horas de trabajo, mejor intenta responder con algo como ésto: “sentía que mis responsabilidades no eran lo suficientemente desafiantes”. De esa forma el empleador sentirá que eres una persona segura y que estás dispuesto a asumir cualquier reto que se te ponga enfrente.

6. “¿CUÁL ES EL PEOR TRABAJO QUE HAS TENIDO?”

Por lo general, este tipo de preguntas las realiza el reclutador o empleador para saber qué tipo de trabajo no te gusta o con cuáles te sientes menos identificado e interesado. Pero también es una forma de saber si en estos casos (si los hubo), hiciste el intento de solucionar el problema de manera proactiva o si simplemente te sentaste y te disgustaste. Por eso lo aconsejable es repasar este tipo de preguntas y ensayar las respuestas, para que no te tomen por sorpresa.

7. “CUÉNTAME DE UN EPISODIO PASADO DONDE HAYAS TRABAJADO CON UNA PERSONA DIFÍCIL”

Esta pregunta es una de las que más saca provecho el reclutador y es la que le permite saber cómo es trabajar contigo. El reclutador o empleador necesita saber con qué tipo de compañero de trabajo te cuesta más relacionarte y colaborar, y si eres capaz de encontrar una solución para que puedan trabajar juntos y cumplir con las tareas que se les asignan. Recuerda que ese empleador estará pagando para que hagas un trabajo y, eso significa trabajar y llevarte bien con todo tipo de personas, incluso aquellas que no trabajan como tú.

8. “¿POR QUÉ FUISTE DESPEDIDO?”

Para cualquiera que haya sido separado de su puesto de trabajo de manera involuntaria, es incómodo hablar al respecto. En todo caso, es importante que seas capaz de compartir lo que te sucedió con objetividad y demostrar en todo momento que eres responsable por cualquiera de tus acciones al enfrentar esa situación. En estos casos debes evitar culpar a tu jefe o a terceros por lo ocurrido, ya que será visto de manera negativa por el reclutador y, más bien, podrías lograr que te saquen del proceso de selección.

9. “¿POR QUÉ QUIERES UNIRTE A NUESTRA EMPRESA?

Según el experto en recursos humanos, Barry Drexler, esta es una de las preguntas que más le cuesta responder a los profesionales en las entrevistas. Por lo general, no es bien respondida, ya que tratan de describir a la empresa, en lugar de explicar por qué quieren unirse a ella. Una buena respuesta puede ser aquella en la que explicas por qué la empresa te agrada y es afín con tus expectativas de crecimiento profesional. Por ejemplo: “sé que Google es una empresa global y quiero ser parte de una gran organización en la que la trayectoria profesional sea ascendente”.

Como ves, no son preguntas del otro mundo, solo que, con el nerviosismo de la entrevista, a veces nos cuesta articular una respuesta que satisfaga al entrevistador. Ahora que ya sabes qué responder, redacta tus respuestas y practícalas muchas veces antes de asistir a la entrevista.

Fuente: Acing the interview, how to score that new job, Inc.com